Bangladesh ha declarado un toque de queda en todo el país tras enfrentamientos violentos entre la policía y grupos estudiantiles que han dejado decenas de muertos. Las protestas comenzaron por un fallo de la Corte Suprema que mantuvo la decisión del gobierno de limitar las oportunidades laborales para graduados universitarios, lo que ha provocado indignación y disturbios generalizados, especialmente en Dhaka.